La volea es uno de los golpes más usados en el pádel, se considera un golpe de ataque. Normalmente la voleas puede ser de derecha o de revés y además pueden llevar efecto plano o cortado.
La Volea es un golpeo parecido al golpeo que se produce en el tenis, con la diferencia de que en el pádel hay paredes , por lo que tendremos que tener en cuenta que si usamos el efecto cortado la bola tiende a caer al tocar la pared y si el golpeo el plano la bola tiende a salir.
Volea de derecha en el pádel
La volea de derecha es el golpe más usado en cualquier partido y se usa una media de 150 veces por partido.
Un buen consejo que debes seguir para realizar correctamente la volea de derecha es golpear la pelota delante del cuerpo.
La empuñadura a usar es la continental, la posición de espera es con las rodillas ligeramente flexionadas y con tensión en las piernas.
En el momento de contacto, el pie contrario a la mano de golpeo es la que avanza hacia delante en la dirección hacia donde queramos mandar la bola.
Volea de revés en el pádel
Lo primero que debemos saber es el tipo de empuñadura que debemos usar, para ejecutar la volea de revés lo mejor es usar la empuñadura continental al igual que en la volea de derecha.
La posición en la pista es otro de los elementos importantes, debemos estar cerca de la red, aproximadamente a un metro para poder golpear con seguridad la bola y minimizar los errores.
La posición de la pala debe estar levantada y mirando a la izquierda, es un golpeo reactivo, no tenemos posición de espera porque normalmente la bola viene muy rápida, un buen truco es girar los hombros a la hora de terminar el golpeo.
Efecto plano y cortado
Efecto plano: La volea plana es el golpeo básico de nivel iniciación, para conseguirla el lugar del golpeo es medio, a la altura del hombro, y es muy importante armar la pala cerca y delante del cuerpo.
Efecto Cortado: Para conseguir la volea cortada debemos tratar de mandar el brazo de golpeo un poco más atrás del cuerpo y subirlo mucho, el golpeo del brazo se produce de arriba a abajo, para conseguir el efecto que al tocar el cristal se quede abajo.